domingo, 5 de mayo de 2013

El 318 bis

El 318 bis no es la puerta donde vive mi amante.
El 318 bis contiene cosas como "El que intencionadamente ayude a una persona que no sea nacional de un Estado miembro a entrar en el territorio de otro Estado miembro o a transitar a través del mismo de un modo que vulnere la legislación de dicho Estado, será castigado con una pena de  ... "
El 318 bis lo puedes interpretar como: "si te encuentras por la calle a un chaval, muerto de frío, le dejas pasar la noche en tu casa y resulta que ha nacido en Canadá y ha llegado aquí sin pasaporte ¡Zas! Eres un delincuente (¡oye! que parece ser que te pueden caer de tres meses a un año)"
Bueno, va ... he sido un poco demagogo, porque dentro del 318 bis también hay un oasis de caridad: "Los hechos no serán punibles cuando el objetivo perseguido por el autor fuere únicamente prestar, de forma ocasional, ayuda humanitaria a la persona en cuestión." ... qué maravilla. Sé bueno, pero solo ocasionalmente. No te dediques a ello a tiempo completo ... no vaya a ser que te metas en problemas.
El 318 bis es un artículo del anteproyecto de reforma del Código Penal que está promoviendo nuestro rancio gobierno, con el ministro Gallardón a la cabeza (yo creo que este señor, que siempre había aparecido cono la derecha moderada de su partido, ha reprimido tantos años su verdadera forma de pensar que ahora le está supurando como pus por todos los poros) No entiendo por qué hay que legislar sobre la caridad, la humanidad, como tampoco entiendo por qué hay que legislar sobre el aborto.
El 318 bis es otro ladrillo en esta pared de la cultura del miedo, la intolerancia y la des-humanidad que están construyendo delante de nuestros ojos ... o eso creen ellos, que la están construyendo. 


viernes, 3 de mayo de 2013

... y entonces se rompió la mampara.

Ayer estaba raro. Enfadado sin saber por qué.

Entonces sucedió:  desde el cuarto de baño oigo a mi chica llamándome a gritos: "¡ven, corre! ¡se está rompiendo la mampara!"  Me faltaban piernas para correr. Entro en el baño y la veo,  preciosa, desnuda, aguantando como podía una de las tres hojas de cristal de la mampara que se estaba descolgando de la guía y a punto de caer hacia la bañera.
Acabé de descolgar el cristal, desmonté el trozo de guía que lo aguantaba y me lo llevé fuera del cuarto de baño para alejar el peligro.
Es una mampara de calidad y no lleva ni tres años instalada.
Enseguida vi el problema: el tornillo que sujeta el perfil de aluminio que sirve de marco para la hoja de cristal, estaba fuera de sitio. No estaba oxidado, ni torcido, ni defectuoso, ni desgastado. Simplemente estaba mal montado desde el principio. Había aguantado mucho tiempo, pero al final se había soltado y casi provoca un desastre.
Pero fue suficiente desmontar completamente la estructura y volverla a montar bien para que quedase como nueva. Mejor que nueva.
No hubo que cambiar ninguna pieza: solo ponerlas bien.

Entonces caí en la cuenta de que hace tiempo, yo también rompí algo. Pero las piezas también eran de calidad y solo tuvimos que volver a montarlas bien. Y la pieza fundamental estaba hoy, conmigo, llamándome desde el cuarto de baño porque se estaba rompiendo la mampara.